La casa Vicens, una joya modernista declarada Monumento Histórico-Artístico de Interés Nacional y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, fue el primer encargo importante de un joven Antoni Gaudí Cornet y supuso la primera vivienda que construyó.
La casa fue construida entre los años 1883 y 1888 para un cliente singular, Manuel Vicens i Montaner, un fabricante de baldosas, y lo cierto es que Gaudí hizo buen uso de ese material y lo combinó hábilmente con la piedra y el ladrillo de construcción. El resultado se puede apreciar en la fachada, la cual está prácticamente cubierta de losetas cerámicas.
Fachada casa Vicens.Foto Flickr.com
Se trataba de proyectar una villa de veraneo en las afueras de la ciudad, en la calle Carolinas en el barrio de Gracia. Ese mismo año, 1883, Gaudí recibió el encargo de la casa El Capricho en Comillas y empezó a trabajar en el templo expiatorio de la Sagrada Familia, un proyecto que se prolongará durante más de cuarenta años. El de la calle Carolinas también le llevó su tiempo. Lo culminó en 1888 e incluía una casa y un jardín. En este último, que rodeaba el edificio, había una cascada y un estanque, pero se perdieron con la venta de una gran parte del terreno.
En esta primera obra ya se advierte que el joven Gaudí no tiene la intención de seguir las pautas de la escuela francesa, predominante en ese momento, sino que busca evitar las líneas rectas, y buscar la inspiración en las formas medievales y en el arte mudéjar. Por esta razón apostará fuertemente por los juegos de azulejos como técnica de ornamentación de la fachada.
La casa Vicens estaba emplazada en un solar de 1035 m2, hoy día prácticamente reducido al perímetro de la casa. La casa está estructurada en cuatro plantas, correspondientes a un subterráneo para ser utilizado como bodega, dos plantas con destino a vivienda (la primera con cocina, comedor y diversas salas, y la segunda para los dormitorios) y unas buhardillas para uso del servicio. En total, el edificio tiene una superficie de 698 m2.
Ventanas exteriores casa Vicens.Foto Pilar Vidal Clavería
La casa está recubierta de ladrillo y cerámica vidriada en la que aparecen influencias medievales y árabes. Esta obra pertenece a la etapa orientalista de Gaudí (1883-1888), periodo en que el arquitecto realiza una serie de obras de marcado estilo oriental, inspiradas en el arte del Próximo y Lejano Oriente (India, Irán, Japón), así como en el arte islámico hispánico, principalmente el mudéjar y nazarí.
Abundan las líneas y los ángulos rectos, tan escasos en la obra posterior del arquitecto con franjas horizontales en la planta baja y pilares en los pisos superiores, cuyas formas se acentúan con la cerámica barnizada.
Igualmente interesante es la reja de hierro forjado de la entrada, que reproduce motivos vegetales, concretamente las hojas del palmito. Antiguamente el jardín disponía de una mayor extensión, y llegaba hasta donde hoy se encuentra la avenida príncipe de Asturias. Cuando se tuvo que reducir el jardín y por ende la reja de hierro, el sobrante de la reja fue a parar al parque Güell, este es el motivo por el cual hoy se puede contemplar la misma reja en ambas fincas.
Verja Casa Vicens.Foto Pilar Vidal Clavería
En el interior destacan los techos de vigas de madera policromada, adornados con temas florales. El diseño de los interiores intensamente trabajados por varios artistas, dieron a cada estancia una atmósfera diferente, sentando las bases de lo que posteriormente será una continua fusión entre arquitectura y el resto de las artes plásticas.
Los muros tienen esgrafiados de motivos vegetales, así como pinturas obra de Josep Torrescassana. Por su parte el suelo es de estilo mosaico romano de opus tessellatum. Gaudí diseñó igualmente el mobiliario de la casa.
Una de las estancias más originales es el fumador, donde destaca el techo en forma de cielo raso decorado con mucarnas árabes, que recuerdan el Generalife de la Alhambra de Granada.
Muros esgrafiados .Foto www.gaudidesigner.com
El diseño de los interiores intensamente trabajados por varios artistas, dieron a cada estancia una atmósfera diferente, sentando las bases de lo que posteriormente será una continua fusión entre arquitectura y el resto de las artes plásticas.
En 1899, Dolors Giralt, viuda de Manuel Vicens, vendió la casa a la familia Herrero Jover, que la ha conservado hasta ahora con mimo exquisito.
Más tarde (1925-1927) el arquitecto Serra de Martínez procedió a una ampliación aunque siguió criterios respetuosos y se mantuvo fiel a las normas y colores originales. En 1927 la casa Vicens recibió el premio del ayuntamiento al mejor edificio.
Casa Vicens.Foto Josep Maria Alegre
En 2014 una sociedad filial del banco andorrano Mora Banc adquirió la Casa Vicens a la familia Herrero Jover con la intención de abrirla al público por primera vez. Tras una exhaustiva restauración se podrá contemplar la casa casi idéntica a como Gaudí la finalizó en 1888 .Aunque por el momento no ha trascendido la fecha exacta de apertura de la casa, se prevé que sea en este próximo otoño del 2017 cuando el público pueda admirar por primera vez y los barceloneses y las barcelonesas podamos admirar esta gran obra arquitectónica de nuestra ciudad.
Junto a la casa VICENS había un colegio de monjas LAS CAROLINAS podéis poner alguna foto / información y recuerdo que también había un pozo o fuente que bebíamos agua y se pagaba esto era en los años 60 GRACIAS
Hola Mercedes,
Exacto las monjas carolinas eran las que hoy dan nombre a la calle.
Respecto a la fuente intentamos buscar fotografías antiguas donde aparezca y las colgaremos en http://www.facebook.com/Monbarcino
saludos
Se nos va el otoño… a ver cuando abre que tengo muchas ganas de conocerla por dentro.
Hola Jordi,
todo y que se había informando que seria en otoño del 2016 cuando abrirían la casa tras la reforma,el otro día pase por delante y el nuevo cartel informa de que abrirán en otoño de 2017 así que habrá que tener paciencia.Saludos